Paro indefinido en Hospital Presidente Juárez por negligencia directiva agrava crisis y riesgos para derechohabientes

Rosario 01/12/25

El Hospital Regional Presidente Juárez del ISSSTE enfrenta una nueva crisis tras el anuncio de un paro indefinido encabezado por personal sindicalizado. Los trabajadores argumentan que persisten riesgos para pacientes y empleados, debido a la falta de atención a sus demandas por parte de la dirección del nosocomio.

Los delegados sindicales del SNTISSSTE Sección XXV y del SUTISSSTE Sección XIII informaron que la base laboral decidió detener actividades ante múltiples inconformidades acumuladas. Señalaron que los problemas afectan directamente la calidad del servicio y ponen en riesgo la salud de la población derechohabiente que depende del hospital.

De acuerdo con la convocatoria difundida, los trabajadores acusan al director, Emanuel de Jesús Cortés Santiago, de mantener una conducta negligente y de incurrir en omisiones administrativas. Afirman que las carencias en insumos, mantenimiento y organización han sido reportadas reiteradamente sin que exista una respuesta efectiva por parte del cuerpo de gobierno.

Los sindicatos expusieron que las condiciones laborales se han deteriorado al grado de impedir una operación segura dentro del hospital. Aseguraron que el personal se ha visto obligado a laborar con equipo insuficiente, instalaciones dañadas y una carga de trabajo que rebasa la capacidad humana, lo que incrementa el riesgo de errores y accidentes.

Los trabajadores destacaron que, antes de llegar al paro indefinido, buscaron diálogo con las autoridades del ISSSTE en Oaxaca y en oficinas centrales. Sin embargo, sostuvieron que sus solicitudes fueron ignoradas, lo cual profundizó el malestar interno y llevó a la decisión de suspender actividades hasta obtener soluciones tangibles.

Los trabajadores inconformes exigieron la intervención inmediata del ISSSTE federal para revisar la gestión directiva y garantizar condiciones adecuadas de atención médica. Afirmaron que el paro continuará hasta que existan compromisos claros y verificables, pues consideran que la salud de miles de derechohabientes no puede seguir expuesta a la improvisación y la negligencia.